LA VITALIDAD
- Javier Muro
- Apr 16, 2015
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Vitalidad tiene que ver con la vida, con vivirla, y con hacerlo con energía y fuerza, con interés.
Tu vitalidad tiene que ver contigo y con tu forma de vivir tu vida.
Tu vida es el bien más preciado que tienes y la forma en que la vives sólo depende de ti, no de los demás o de las circunstancias externas.
Perdemos vitalidad cuando nuestra cabeza va por un lado, nuestras emociones por otro y empezamos a perder conciencia corporal.
Cuando cuerpo, mente y emociones no van a una, somatizamos llenándonos de rigidices, en una palabra, enfermamos. Entonces podemos decir que nos desvitalizamos y la vida pierde sabor y color, nos sentimos sin energía.
Saber aunar los aspectos mentales, emocionales y corporales es un arte. Es el arte de saber vivir vital y contento con uno mismo.
Hoy en día es muy frecuente vivir de forma escindida, buscando la felicidad a través de dar prioridad únicamente a alguno de nuestros tres aspectos, en detrimento de los otros dos.
Hay personas que buscan la felicidad a través de la seguridad que puede ofrecer el intelecto. Intentan entenderlo todo, a través de explicaciones lógicas que hagan previsible la vida y por lo tanto segura y controlable.
Otras buscan ser felices a través de la intensidad que produce la química de las emociones. Esta se pone en funcionamiento a través del mundo de las relaciones. Es una dinámica del tipo “siento luego existo”, por lo tanto cuanto más intensidad más crece la impresión de estar vivo, sino hay intensidad hay vacío y por lo tanto malestar.
Un tercer grupo busca la felicidad a través de la actividad física y la acción, cuanto más corro, salto o nado más vivo estoy. Adrenalina por adrenalina, el cuerpo visto como máquina. Seré feliz si tengo un reto físico a superar, y cuando éste ya lo esté consiguiendo, ya estaré pensando en el próximo.
Cualquiera de estos tres aspectos exagerados nos hace perder la vitalidad ya que perdemos de vista el resto de nuestra totalidad.
El arte de vivir con vitalidad y energía consiste en poder vivir en equilibrio nuestras emociones y pensamientos. Esto lo podemos hacer a través de nuestro cuerpo que normalmente es el gran olvidado más allá de la actividad deportiva.
A través de un sano contacto con nuestro cuerpo podemos aprender a reequilibrar los tres aspectos de nuestra experiencia vital, viviendo con más felicidad.
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